Misericordia: es una de las palabras más mencionadas en la Biblia. Por citar un ejemplo, sólo en el Salmo 136 se nombra ¡26 veces!. Mucha gente ha oído hablar de que Dios es Misericordioso, pero tal vez no sabe bien lo que eso significa. El hombre por sí mismo, no logra construir su propia felicidad. Dios toma la iniciativa y forma a la mujer de la costilla del hombre. Al despertar el varón reconoce en la mujer: “Ahora sí, esta es hueso de mis huesos y carne de mi carne”. Gen. 2:23. El encuentro entre el varón y la mujer es como de sumisión, este es de reconocimiento de la igualdad, de la mutua necesidad y complementariedad. Hombre y mujer se diferencian y se necesitan, forman una unidad y en eso está la clave de su realización. Según. Mateo 19: 6. La unidad de la pareja, en relaciones de igualdad, de reconocimiento y de respeto de la dignidad del otro con sus diferencias, de ayuda, colaboración y complementariedad, es obra de Dios. No es el ser humano el que logra su felicidad. El amor no es una conquista, no se puede producir, comprar o vender; es una gracia, un regalo, un don, que se acepta y se cuida con responsabilidad. El amor y la unidad en la familia son signos de la presencia de Dios en ella, y por lo tanto es indisoluble no existe una segunda unión para Dios.1Corintios: 7: 10-11. Romanos 7:2-3.